Mala tarde de pesca esta del domingo… Dia frío, nublado y en ocasiones con lluvia, así y todo Mª José y yo nos fuimos muy animados al embalse de San Juan, a la zona de Pelayos de la Presa.
Cuando llegamos encontramos el embalse con poca o nula actividad de los peces. Sin embargo, caminando poco a poco por la orilla acabamos descubriendo numerosos barbos de color muy muy claro mimetizados totalmente con el fondo, esto los hacía especialmente difíciles de localizar, a demás se encontraban muy recelosos y sumado a la extrema claridad de las aguas era francamente complicado acercarse, no obstante el viento no soplo con fuerza durante gran parte del día por lo que no tuve problema en hacer lances largos de los que disfruté muchísimo.
De quien sería esta caña...? Allí no había nadie. Espero que no la dejara abandonada al ver que la Guardia Civil estaba por allí, y... vaya, que casualidad, ha sido la primera vez que me solicitan la licencia de pesca desde el 97, año en que conocí el embalse.
La jornada se saldó con muchas picadas de buenos barbos, pero que mordieron muy mal, algunos bases y una bonita boga. Y quiero hacer mención especial a una picada de un buen bass que mordió el rapala de Mª José y que no quiso salir del agua.
Por otro lado, el embalse presentaba una estampa bastante distinta a la de otros domingos debido al mal tiempo, estaba vacío, nada que ver con otros días en los que el San Juan se convierte en improvisada playa, a demás la extrema sequía había hecho estragos y se encontraba muy muy bajo.
No obstante, hacía mucho tiempo que no pescaba tan a gusto, y es que cuando uno va de pesca, lo de menos, es pescar. Creo que muchos estaréis de acuerdo conmigo cuando afirmo que un día de pesca sin peces no tiene porqué ser un mal día de pesca, en ocasiones, el lugar, el tiempo o en este caso el silencio me hizo disfrutar de la tranquilidad del campo.
Un saludo a todos!